¿En qué se diferencia el psicoanálisis de otras psicoterapias psicológicas?
Fundamentalmente en sus postulados teóricos, es decir, para explicarlo de manera sencilla, de cómo se entiende el comportamiento humano. Para el psicoanálisis el sujeto está constituido por un entramado lingüístico desde su nacimiento incluso ya antes de su existencia, como criatura esperada por sus padres, ya está sumergido en un mundo simbólico, es decir de lenguaje.
Somos, pues, seres hablados, donde nuestros deseos, nuestra manera de estar en el mundo, de vivir y sentir nuestra existencia está constituida en ese campo de nuestras relaciones parentales y demás figuras que han compartido nuestras vidas. Por tanto, la psicoterapia psicoanalítica tiene como fundamento la escucha del psicoanalizante utilizando el método llamado de la asociación libre donde él en un decir, exento de dirigismo, consejos y sin coacciones alguna, pueda ir emergiendo y entramando esas relaciones inconscientes que le ayuden a entender las causas de su comportamiento.
Es ese asociar libremente de su discurso lo que le permite encontrar las significaciones de aquellos conflictos personales, como son las obsesiones, ansiedades, fobias, depresiones, comportamientos de agresividad, de dependencia con las drogas o con el alcohol, y que es gracias a la presencia del analista que hacen posible su alivio y mejoría que le permite encontrar su propia manera de abordarlos.
Se trata así, de un ir revelando las relaciones inconscientes en un proceso que hasta entonces estaba reprimido. Y eso es posible por la relación con el psicoanalista, en la llamada relación de transferencia que posibilita esos cambios. Es el vínculo de confianza entre ambos que permite que el analizante libremente hable, asocie los recuerdos, las palabras que se van articulando y señalando la dinámica de su manera de pensar, de configurar sus deseos, de su manera de estar en el mundo.
Las demás psicoterapias, llamadas no analíticas o simplemente terapias, son numerosas y cada una se basa en una forma de entender el comportamiento humano, Entre las más conocidas tenemos las terapias que son básicamente conductistas en sus diferentes formas pero que el principio básico elemental es el estímulo y la respuesta donde se trata de modificar la conducta no deseada a través de introducir otros estímulos incompatibles o inhibiendo el comportamiento concreto indeseado. Aquí lo importante es la observación de la conducta evitando entrar en los aspectos más íntimos y subjetivos de la persona.
También hay terapias que plantean una idealización de lo que uno deber ser para realizarse y alcanzar la felicidad, sintiéndose más capacitado personalmente o socialmente utilizando técnicas como la meditación, entrevistas y consejos, la escenificación de conflictos o dificultades del sujeto para poder verse el mismo y así superarlos. Son intentos de gestionar las propias emociones.
Todo dependerá del terapeuta y de su ingenio para abordar la problemática en cuestión y que buscará en una de esas técnicas la más conveniente para aplicarla al caso concreto.
Decir que desde el psicoanálisis todas estas terapias o psicoterapias no analíticas, plantean fundamentalmente una idealización de cómo debe comportarse el ser humano, incluso prometiéndoles un desarrollo y un crecimiento personal y social cercano a una felicidad casi idílica.
Pero no plantean básicamente lo que hace el psicoanálisis, el tener en cuenta cuáles son sus deseos, por qué esta persona ha llegado a esa situación dolorosa, y que a veces ha repetido a lo largo de su vida, tomando decisiones sin saber por qué le han perjudicado, es decir decisiones inconscientes, sin poder evitarlas. Se trata, a menudo, de personas que teniendo unas capacidades intelectuales o artísticas están asumidas en la mediocridad y en el sufrimiento. Es ahí donde se debe analizar para encontrar las motivaciones que le han llevado a su estado actual porque es así como se podrán evitar su repetición. Es él quien debe encontrarse así mismo, encontrar sus propias soluciones para que decida cómo quiere que sea su existencia en el mundo.